No os dejéis engañar por el título o por el tráiler: en 'Birdman' no hay tipos enmascarados con capa, ni acción, ni explosiones. Es la historia de Riggan Thomson (Michael Keaton), un actor en horas bajas que alcanzó la fama en los años noventa por interpretar al superhéroe que da nombre al filme y que trata de relanzar su carrera con el estreno de una obra de teatro en Broadway. Es una cinta difícil de clasificar, se dice que es una comedia con toques dramáticos, pero yo diría que es todo lo contrario: un drama con pinceladas de humor. Es un relato sobre la fama, el ego, los sueños frustrados, la culpa y la redención. Pero también es una sátira hacia Hollywood en general y hacia el cine de superhéroes en particular (con referencias explícitas, en algunos casos).
El apartado técnico de la película es para levantarse y aplaudir. Realmente, su director, Alejandro González Iñárritu ('Amores perros') no inventa nada al emplear un falso plano secuencia sobre el que transcurre toda la acción (el mismísimo Hitchcock ya lo hizo en 'La soga'), pero el hecho de sentir que traspasamos la pantalla y acompañamos a los personajes por esos estrechos pasillos y camerinos del teatro convierten a 'Birdman' en una experiencia única. Este recurso narrativo otorga a la cinta un gran dinamismo gracias a sus constantes cambios de escenario sin cortes, como si de una verdadera obra teatral se tratase. Asimismo, la película está repleta de referencias cinematográficas, de simbología y de mensajes ocultos que invitan a futuros revisionados. Hay que destacar, además, la batería que conforma la banda sonora y que marca el ritmo del filme de principio a fin de manera muy acertada.
El reparto merece un párrafo aparte porque están todos inconmensurables. No es para nada casual la elección de Michael Keaton como protagonista, ya que él mismo interpretó en su momento al Batman de Tim Buton y desde entonces su carrera entró en declive, por lo que comparte ciertos paralelismos con su personaje. El caso es que con 'Birdman', Keaton ha vuelto a sacar ese actorazo que lleva dentro y protagoniza, junto con un también inspiradísimo Edward Norton ('American History X'), las mejores secuencias del filme. Los demás secundarios están también a un gran nivel, destacando los papeles de las guapísimas Emma Stone ('The Amazing Spider-Man') y Naomi Watts (que ya trabajó con el director en '21 gramos'), así como el de Zach Galifianakis (más conocido como el gordo de 'Resacón en Las Vegas'). Mención especial merecen también los diálogos, algunos de ellos realmente ingeniosos y rompedores, pero con mucha profundidad.
El 2015 acaba de empezar y ya tenemos una seria candidata a película del año. Todo funciona a la perfección en 'Birdman', desde su frenético arranque hasta su acertado final, para confeccionar una cinta absorbente, divertida por momentos, triste por otros, salvaje y atrevida. Películas como esta nos recuerdan que el cine sigue vivo.
Mi reacción tras ver 'Birdman (o la inesperada virtud de la ignorancia)':
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